Fernando Alonso logró la victoria en su primera carrera con Ferrari y ya lidera el Mundial de Fórmula 1. Su triunfo en Bahrein llegó precedido de una lección de conducción, pero a mí me supo a poco. Esperaba con interés este campeonato y la primera carrera ha sido como tantas otras de los últimos años: aburrida.
¿Qué le falla a la Fórmula 1? Principalmente, que no hay adelantamientos, que deberían ser la salsa de las carreras. A falta del elefante y la locomotora, la Fórmula 1 cada vez se parece más a un tiovivo. Si no le falla el Red Bull a Sebastian Vettel, Alonso hubiera sido segundo con un único adelantamiento en carrera, el que realizó a su compañero de equipo, el brasileño Felipe Massa, nada más empezar la prueba. Hay quienes dicen que la victoria del español era algo seguro porque el ritmo de carrera de Alonso era superior al del alemán, y ese dato es cierto, pero creo que no hay que engañarse. Los monoplazas de la Fórmula 1 son tan perfectos que es casi imposible adelantar. Las turbulencias que producen los nuevos difusores, el exceso de carga aerodinámica... Se pueden poner muchas excusas, pero lo cierto es que, para adelantar, los pilotos tienen que esperar un error de quien les preceda, salvo que la diferencia de monoplaza sea abismal. Como esto sólo pasa entre los coches de arriba y los de abajo, las carreras van a ser monótonas, como la mayoría de los últimos años. Las mejores acciones las protagonizarán pilotos de escuderías potentes que salen desde detrás por culpa de una mala calificación, y que podrán adelantar sin problemas a los últimos del pelotón.
Encima, ahora no se puede repostar, por lo que todos los coches salen cargados de gasolina hasta los topes, lo que iguala las cosas y ha acabado de un plumazo con las estrategias que daban un poco de vida a las carreras. Así, casi todo va a depender de los neumáticos, de su degradación. Encima, el miedo a desgastarlos en exceso lleva a algunos pilotos a ir pisando huevos. ¡Uf! ¡Vaya Fórmula 1 podemos tener este año con las nuevas normas!
Por lo demás, el Gran Premio de Bahrein demostró que Ferrari y McLaren estarán arriba con Red Bull y Mercedes. En especial, el título debería ser cosa de este repóker: Alonso, los alemanes Vettel y Michael Schumacher, y los británicos Lewis Hamilton y Jenson Button. Quizá incluso quitaría al vigente campeón aunque parezca arriesgado descartarlo tan pronto, pero me parece un piloto inferior a los otros. En cuanto a Schumi, no seré yo el que descarte al piloto de Fórmula 1 más laureado de todos los tiempos, pero supongo que pagará un peaje después de estar tres años retirado. Lo contrario sería propio de un super héroe.
De los españoles, aceptable papel de Jaime Alguersuari (Toro Rosso) y de Pedro Martínez de la Rosa (BMW Sauber). Empezaron muy rezagados por culpa de una mala clasificación, ninguno de los dos puntuó y el segundo no acabó la carrera por un fallo hidráulico en su coche, pero la impresión que dejaron no fue mala en cuanto a pilotaje.
Un saludo
PD: Hispania Racing bastante tuvo con empezar el campeonato, algo que no pudo hacer US F1 Team, un ejemplo práctico de lo que es un castillo de naipes en el aire. Pero en estas primeras carreras, el equipo español va a ser el más firme candidato a ocupar las dos últimas plazas. Es lo que tiene competir con un seiscientos maqueado a toda prisa contra coches de carreras.
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