¿Sanción ejemplar a Cristiano Ronaldo o paripé?

Acaba de salir la noticia. El Comité de competición ha sancionado a Cristiano Ronaldo con dos partidos por el golpe que el jugador del Real Madrid propinó a Mtiliga, del Málaga. No ha entendido la acción como agresión porque el castigo hubiera oscilado entre cuatro y doce encuentros, pero ha subido la cifra respecto a los castigos que ha impuesto esta temporada por acciones similares. El Madrid ya ha anunciado que recurrirá la sanción porque, de mantenerse el castigo, pierde al astro portugués para los duelos ante el Deportivo y el Espanyol.



Lo primero que voy a decir es que la sanción a Cristiano es un paripé. ¿Por qué? Porque está puesta adrede para que se quede en un partido tras la correspondiente apelación. Estoy convencido de que CR9 podrá jugar ante el Espanyol. Ya ha pasado en otros caso y éste tiene todos los visos de seguir por el mismo camino, sobre todo por los precedentes. El jueves, cuando dictamine Apelación, comprobaremos si es así, aunque todavía quedaría un tercer tribunal, el de Disciplina Deportiva.

Respecto a la justicia de la sanción, yo creo que no lo es y que con un partido sobra. ¿Sólo uno? Sí, sólo uno. Cristiano no quiere agredir al jugador malacitano y coincido con él en que cualquiera que haya jugado al fútbol sabe que ante un agarrón como ése, se mueven los brazos para intentar zafarse. Yo hubiera puesto un partido por la puntería de romper la nariz del danés. Porque, seamos sinceros, al jugador del Madrid se le castiga por la puntería, por la sangre y por el mes de baja de Mtiliga. Si le hubiera dado en el pecho,o en un hombro, ni hubiera sido expulsado.

No hay más que ver el caso de Leo Messi con Valiente, del Sevilla. Es lo mismo sólo que el del Barcelona tiene la suerte de que él es bajito y su rival alto (no al revés como en el caso de Cristiano), por lo que su golpe se queda entre el cuello y el pecho. Aunque aquí también influye otro hecho que habla de la injusticia del trato de los árbitros. Messi cae bien y su incidente se quedó en nada. De hecho, no vio ni la tarjeta amarilla. En cambio, CR9 es odiado por mucha gente porque está cuadrado, es un chuleta y costó mucho dinero, por lo que todo lo que sea darle caña se ve bien y se aplaude.

No hay más que recordar su anterior expulsión en Liga. A Cristiano le soltó un puñetazo por la espalda un jugador del Almería. Sin embargo, nadie criticó a Ortiz. Se dijo que lo suyo fue un manotazo, una colleja, una simple provocación. ¿Qué? Me hubiera gustado ver a muchos de los que opinaron eso en un lance igual, a ver si tampoco soltaban una patada a su rival como respuesta. Y en este caso, la agresión de Cristiano se quedó en una tarjeta amarilla, lo que habla mucho de la disparidad de criterios de los árbitros o de su pobre nivel. Ahora, Mtiliga también dice que él no es el malo de la película, como si su intención hubiera sido la loable de jugar el balón y no la de hacer falta a su rival.

Seamos justos con Cristiano. Un partido es suficiente.

Un saludo